Mi enhorabuena y reconocimiento a Aesleme por su 35º aniversario. Desde que recalé en la Fiscalía de Seguridad Vial, allá en el año 2012, he sido testigo de la trascendental labor que Aesleme y, en especial, Mar Cogollos han desarrollado en nuestro país a favor de la seguridad vial durante todos estos años, muy principalmente en su compromiso con las víctimas de siniestros de tráfico y con la educación vial como principal medida preventiva. También mi agradecimiento sincero por vuestra contribución para hacer visibles a las víctimas y hacernos ver, desde la perspectiva de las funciones que cumple la Fiscalía de Seguridad Vial, que detrás de cada procedimiento que despachamos existe una víctima -cada una con su particular tragedia humana- que merece ser contemplada desde un punto de vista humanitario y valorada como el eje fundamental del proceso y de nuestra actuación, para que todos sus derechos, tanto morales como resarcitorios, sean respetados, protegidos y reparados en su justa medida. Confío en que sigamos trabajando con ese objetivo compartido.